Preguntas frecuentes

La leche materna es el alimento ideal para los bebés, ésta se va adaptando a las necesidades y requerimientos de cada bebé, por lo que la Organización Mundial de la Salud y otras organizaciones de salud internacionales recomiendan que la lactancia materna sea exclusiva (sin tés, agua, jugos, caldos, probaditas de alimentos, etc.) durante los 6 primeros meses de vida de tu bebé; posteriormente se recomienda complementar con alimentos sólidos, continuando con la leche materna hasta por lo menos los 2 años de edad (o más), esto quiere decir que no hay como tal un límite en la duración de tu lactancia, ésta puede ser hasta que tú y tu bebé lo decidan. 

https://www.who.int/es/health-topics/breastfeeding#tab=tab_2

No hay compatibilidad entre la lactancia y el reloj. La lactancia debe ser a libre demanda, sin límites ni horarios, ya que de esta manera puedes asegurarte de que tu bebé tome lo que necesite en cada toma, y éstas a su vez van a variar en su duración a lo largo del día y de la edad que vaya teniendo tu pequeño, ya que dependerá de sus necesidades del momento (algunas veces estará mamando un buen rato porque necesita comer más, y otras lo hará tan solo unos cuantos minutos porque tiene menos hambre o para saciar su sed, además de que la lactancia cubre otras necesidades como el contacto y apego con mamá, sentir su cariño, cercanía y protección. ¡Tu leche es todo lo que necesita tu bebé!

Si amamantas a tu bebé a libre demanda, y al terminar sus tomas se queda tranquilo y satisfecho, mientras tú percibes como ha vaciado tu/s pecho/s; y al mismo tiempo, en el día a día tu pequeño orina y defeca adecuadamente, puedes estar tranquila de que tu bebé está comiendo de ti adecuadamente. Esto se verá reflejado en el aumento adecuado de peso en sus controles pediátricos de rutina.

Para mantener y estimular tu producción de leche es recomendable hacer tomas de pecho frecuentes y lograr siempre un vaciado profundo, siempre a libre demanda, sin ningún tipo de horarios; de igual manera un extractor de leche te podrá ayudar para realizar un estímulo extra a tus pechos para esta estimulación.

Sin embargo, ya que en la producción de leche pueden influir muchos factores, te recomendamos que agendes una consulta, donde una de nuestras asesoras puede realizar un diagnóstico adecuado y darte un tratamiento personalizado para ti y tu bebé acorde a su historia clínica particular.

Cuando existe la sospecha de que un bebé amamantado tiene síntomas de alergia a la proteína de leche de vaca (lo cual no es lo mismo a la intolerancia a la lactosa), NO es necesario suspender la leche materna, sino que se puede suprimir por completo las proteínas lácteas de la dieta materna. 

Una vez excluidas las proteínas de leche de vaca de la dieta materna, los síntomas del bebé mejoran bastante en un tiempo variable, dependiendo del cuadro clínico presentado. Se necesita al menos una o dos semanas para que la leche materna esté completamente exenta de dichas proteínas ingeridas, a veces unos cuantos días antes. 

https://www.aeped.es/sites/default/files/201203-preguntas-frecuentes-actualizado-feb2015.pdf

Diversas sociedades médicas, expertos y consensos de expertos consideran que NO hay que suspender la lactancia, ya  que  ésta protege al intestino del bebé de la inflamación y del daño epitelial causado por las infecciones.

https://www.e-lactancia.org/breastfeeding/infant-acute-gastroenteritis/product/

Toda leche materna es rica en lactosa, ya que ésta es necesaria para el desarrollo óptimo de tu bebé. Hay ocasiones donde, por algunas patologías transitorias, como una gastroenteritis, el sistema gastrointestinal de un bebé puede verse irritado y continuar con síntomas como gases o heces líquidas, sin embargo, la leche materna no debería suspenderse, ya que ésta la estará tolerando mucho mejor que cualquier sucedáneo de leche materna, además de que le estará aportando los nutrientes, líquidos y defensas para su más rápida recuperación.

Por otro lado, existe otro tipo de intolerancia total a la lactosa, de origen genético y extremadamente poco común. Esta enfermedad, llamada Galactosemia se detecta a los pocos días del nacimiento, en pruebas del tamiz neonatal o después de síntomas graves y sólo en estos casos se recomienda la suspensión de la lactancia materna.

https://waojournal.biomedcentral.com/articles/10.1186/s40413-017-0173-0

Es posible, tomando en cuenta que el alcance del tratamiento depende de diversos factores que se deben evaluar en la consulta, desde la disposición del bebé a volver a mamar del pecho de nuevo, el tiempo que ha transcurrido desde el último estímulo en los pechos, así como antecedentes clínicos como el desarrollo anatómico de la mama, enfermedades previas y el apego al tratamiento indicado.  

Sin embargo, es importante tener presente que la lactancia no tiene que ser “todo o nada”, así como una lactancia exitosa no se define por la cantidad de leche materna que se le da al bebé, ya que cada gota le aporta innumerables beneficios a un bebé, sí tú lo deseas, ¡vale la pena intentarlo!

Una de las formas que puedes intentar de forma inicial para destetar a tu bebé de forma respetuosa, es "no ofrecer, no negar", de esta manera tu pequeño puede ir dejando poco a poco las tomas de pecho sin sentirlo obligado, ya que sólo tomará "cuando se acuerde", sin recordarle las tomas que antes acostumbraba.

Hay varios tips que te pueden servir durante este proceso, como distraerlo con actividades, juegos nuevos, paseos al parque, etc. Si lo requieres, contamos con consultas personalizadas, para ayudarte con más herramientas adecuadas para ti y tu bebé, dependiendo de sus rutinas ya establecidas y otros datos específicos de su historia clínica de lactancia.

Si necesitas tomar medicamentos durante tu lactancia, puedes consultar con tu médico. La gran mayoría pueden ser usados durante esta etapa. Los prospectos por ley deben incluirse en todos los medicamentos, pero no siempre reflejan la realidad de compatibilidad de estos con la lactancia, ya que no todos los fármacos pasan a la leche en cantidades significativas que afecten la salud de tu bebé y en general, prácticamente en la gran mayoría de las circunstancias pueden ofrecerse alternativas si el fármaco elegido conlleva algún tipo de riesgo. 

No olvides que con nuestra asesora de lactancia siempre podrá ayudarte a revisar la compatibilidad de los medicamentos que tu médico te indique.

https://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/201701-lactancia-materna-mejor-ambos.pdf

Aunque es de muchísima utilidad tomar tu sesión de lactancia con tu bebé presente, recomendamos en gran medida tomar una consulta prenatal de lactancia durante el último trimestre de tu embarazo, esto es de mucha utilidad para llegar al esperado día lo mejor preparada posible, de esta manera podrás aclarar todas las dudas que tengas sobre este tema, conocer qué es normal y qué no durante la lactancia, y cuáles serían las mejores decisiones a tomar desde el momento del nacimiento de tu bebé, para que comiences tu lactancia con el pie derecho y exista la menor probabilidad de dificultades… Y en caso de que las haya, ¡tendrás el contacto directo con nuestra asesora experta para que te ayude a solucionarlo!